Editorial – desafíos de la izquierda – julio 2014

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En este mate amargo queremos seguir profundizando sobre los desafíos que tiene por delante la izquierda. Queremos hablar sobre futuro y renovación. Pero esta discusión no debe  ser un una disputa entre edades, porque  solo genera divisiones al pedo.

El acceso a nuevas responsabilidades de conducción, de dirección, de gestión, dentro de la izquierda toda, tanto política como social, no depende de los lugares que ocupen ciertas generaciones. No creemos deba ser una carrera de postas donde los viejos la van pasando  a los que vienen atrás y así sucesivamente.

¿Cuál es el rol en la construcción de la liberación nacional y el socialismo? ¿Cuál es la táctica y la estrategia para los próximos 20 años?

Asumir la responsabilidad histórica implica que los jóvenes de hoy; serán los que seguirán luchando en los próximos 20 y 30 años dentro del Uruguay.

Porque el camino de la liberación nacional y el socialismo está plagado de contradicciones, de avances y retrocesos, todos ellos determinados por las correlaciones de fuerzas que somos capaces de construir las organizaciones que pelean en principio, por un país y un mundo más justo.

Este debe ser el eje por cual  movernos. Es hoy el Frente Amplio la expresión de esa esta estrategia porque en él existe la posibilidad de llegar a acuerdos que nos permitan avanzar en el camino antes planteado. Y esto es así porque cualquier organización que está en el FA por sí sola no puede avanzar.

Este camino está lleno de contradicciones, resolverlas es la tarea, pero sobre una correlación de fuerzas real, no la del panfleto.

La renovación política está enmarcada dentro de esto que expresamos, y queremos aportar desde nuestro lugar, que es condición para avanzar, no sustituir, no sacar a otros, sí ser parte de este momento histórico y proyectar nuestra estrategia en los tiempos que corren.

Debemos tener claro que a la derecha y al capitalismo no se les gana con una izquierda fragmentada. Es por tanto que debemos ver, pensar y actuar para asegurarnos construir un país donde prime la justicia social sobre el poder del capital.

Por: Colectivo Mate Amargo

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