“Lo imperioso hoy es fortalecer los lazos de nuestro Frente Amplio, con todas las organizaciones, grupalidades, expresiones populares, para fortalecer la concreta e imprescindible meta de sabernos en la lucha por un país diferente”
MA: Habiendo culminado la discusión del proyecto de Rendición de Cuentas 2020 en la Cámara de Diputados, ¿cómo evalúas la propuesta presentada tanto en el nivel de recursos como de programas que atiendan las necesidades sociales?
LE: La Rendición de Cuentas del 2020 del gobierno es lo que esperábamos, trajo más recortes que los anunciados. Ya no solo hay menos recursos asignados a los incisos, sino que también retacea competencias a varios organismos y desaparecen programas y proyectos en otros. Hay recorte económico y también recorte programático.
Por supuesto que esto es una mala comprobación para las grandes mayorías del país, ya que las políticas públicas imprescindibles para mitigar los impactos de la pandemia y poder iniciar un camino de mejora de la calidad de vida de la gente, no estarán a la altura de lo que se necesita.
Hay una explícita decisión política del Poder Ejecutivo de debilitar todo lo que, aun con necesidades insoslayables de mejora, se puso en el centro de la distribución de recursos en los últimos años: la vida de la gente, el trabajo, la salud, la vivienda, la educación, las prestaciones sociales, el acceso a la cultura, el desarrollo productivo. Ni una sola de las políticas y programas que desarrollan los ministerios, los servicios descentralizados, los entes autónomos, reciben recursos adicionales y sostenibles en el tiempo, sino todo lo contrario.
La única excepción de muchísima importancia que acompañamos con convencimiento desde el Frente Amplio es un refuerzo económico para la primera infancia, que no obstante, vino redactado en un artículo que expresa lo mínimo, sin perspectivas de una gestión cierta, a la que ninguno de los organismos que participarán (MIDES, MSP, ASSE, MVOT, INAU, ANEP, etc.) pudo dar una sola respuesta de cuáles son los objetivos a alcanzar, cuál será la metodología de trabajo, los plazos, cuándo y cómo deberá involucrarse para generar realidades diferentes para jóvenes embarazadas, niños y niñas de 0 a 3 años.
MA: Esa enunciación sólo en titulares de las políticas propuestas y lo realizado parece ser el tenor del gobierno. ¿Cómo recae ello en el trabajo parlamentario? ¿Cómo presentaron los resultados que en 2020 obtuvieron por el desarrollo de la LUC?
LE: Esta ausencia de respuestas no fue excepcional, al contrario, fue la tónica de esta Rendición, donde prácticamente todos los incisos y organismos esquivaron la puesta en común de la gestión durante el 2020; y otros improvisaron su presentación minutos antes de iniciar la sesión. La transparencia tan pregonada, faltó a la cita las más de las veces y unas pocas fue muy tenue.
La Rendición de Cuentas, como instancia, es un hito estructurador del trabajo parlamentario, marca un antes y un después para el país. La espera el sistema político todo, los empresarios, los trabajadores, las organizaciones sociales, y sin embargo recayó más en la capacidad de preguntar por parte de la oposición que en la voluntad de las autoridades de rendir cuentas en contenidos programáticos y presupuestales.
En varias oportunidades se nos cuestionó como oposición, reclamándonos la extensión de las preguntas o la cantidad de las mismas, pero lo cierto es que, a excepción de los contenidos fiscales, los documentos eran escuetos y las presentaciones de los incisos más aún.
En el 2020 fue para el gobierno la Ley de Urgente Consideración (LUC) y el Presupuesto Nacional los hilos conductores de su proyecto de país selectivo. Vaya si habría contenidos, acciones, decisiones, resultados para transparentar en el parlamento y sin embargo justamente trataron de evitar exponer o responder sobre estos aspectos.
Es paradójico, tener la oportunidad de mostrar las urgencias que la LUC resolvería y sin embargo hasta casi que se la olvidó por parte del gobierno. Hubo que preguntar especialmente acciones que debían haber sido desarrolladas, institucionalidades creadas en la LUC y que deberían estar en funcionamiento, recursos que se generarían en artículos de esa LUC, organismos creados y con recursos asignados en el Presupuesto, anuncios de transformaciones urgentes, que debieron ser preguntadas porque fueron omitidas en los documentos escritos, y magras respuestas en las comparecencias. Las urgencias de aquella ley, no fueron tales como lo dijimos en su tratamiento “express”.
MA: Las Rendiciones de Cuentas contienen elementos de diagnóstico de la coyuntura del momento y en función de ello se presentan soluciones a los problemas identificados. ¿Cuáles son los elementos del diagnóstico que resalta el gobierno y qué proponen para solucionarlos?
LE: No podemos perder de vista, que las Rendiciones de Cuentas son mecanismos de fiscalización del sistema político que en una democracia representativa adquiere muchísima relevancia. No para informar solamente, sino para identificar posibilidades reales de construcción de acuerdos. La vida de la gente necesita acciones concretas del sistema político y del gobierno en un momento de crisis y no solamente adjetivos para la comunicación.
Las verdaderas urgencias de la gente, en la materialidad de un estado de bienestar están en jaque y expectantes de que algo pueda cambiar en esta Rendición de Cuentas. El gobierno sabe y dice que: “En Uruguay, el 60% de los niños de 0 a 3 años de edad nacen y viven en hogares ubicados en los dos quintiles inferiores de la distribución del ingreso, con problemas de alimentación, vivienda, educación y necesidades básicas insatisfechas”. Sin embargo no hay recursos adicionales para que el INAU pueda garantizar la gestión de los centros CAIF ya construidos y otros en construcción. Así también señala que el “37% es sometido a agresiones físicas en el hogar” pero el gobierno retiró y desmanteló los programas y dispositivos que atendían estas situaciones de forma complementaria, como los SOCATS, Cercanías, Jóvenes en Red. Todos perfectibles y modificables, pero sin alternativa ninguna, se dio la baja a lo existente.
En salud, ASSE promovió la creación de la «Casa del Desarrollo de la Niñez»; sin embargo, no tiene recursos adicionales, es más, vino con menos presupuesto desde el 2020, y así tiene problemas gravísimos y sostenidos de falta de medicamentos, de debilitamiento del primer nivel de atención en el interior del país, de falta de especialidades claves en esto como son los psicomotricistas y fonoaudiólogos, y no tienen con qué recursos contratarlos. Es más, la atención a niños y niñas con dificultades del aprendizaje atendidos mediante las ayudas extraordinarias del BPS hoy están en jaque también, con recortes y limitaciones que ponen en riesgo la atención de 15.000 niños y niñas.
MA: Respecto a la inversión, el gobierno reconoce su importancia en el crecimiento económico ¿qué aspectos resaltan en la propuesta de Rendición de Cuentas?
LE: El gobierno sostiene en la Exposición de motivos del proyecto de Rendición que “La inversión pública complementa e induce a la inversión privada a nivel agregado, con lo cual su impacto sobre el crecimiento económico es especialmente significativo. En tanto, las inversiones en infraestructura social como salud, educación y vivienda contribuyen a la equidad a partir de la mejora de la capacidad física disponible”. Sin embargo desde el sector privado se reclama la inversión pública, que no solo no está en los recursos, sino que además el “timing”, ese momento crucial para desplegarse se está perdiendo y lo señalan los propios interesados. Los niveles de empleo se mantienen sobre el desarrollo de las obras del Ferrocarril y la Planta de UPM 3, pero lo que no puede sustituirse es la inversión pública, que aún hoy sigue ausente.
En relación a la infraestructura en vivienda, señalaron que “en 2021 se prevé avanzar en la búsqueda de alternativas para aumentar la oferta de vivienda nueva para venta o alquiler, a través de la cooperación entre los sectores público y privado mediante nuevos instrumentos financieros. En ese sentido se destaca el avance en la creación de un fideicomiso que, a través de la emisión de títulos de deuda, obtenga los recursos para invertir en proyectos de construcción de vivienda de interés social”. Esto lo establecieron y lo anunciaron en el Presupuesto y mes a mes desde julio del año pasado, no solo no se ha cumplido con esto, sino que además no se ha concretado una sola licitación, las cooperativas pierden a razón de 500 préstamos por año, demorando meses y meses en escriturar, no se ha iniciado un solo proyecto de realojo nuevo y se enlentecieron las obras de mejoramiento de barrios en decenas de asentamientos.
Y ahora suman un nuevo fideicomiso, esta vez para la regularización de asentamientos, sobre la base del desmantelamiento del Instituto Nacional de Colonización. Se le sacaron 6000 millones de pesos al FONAVI, según lo informado por el propio Ministerio en la página 94 al 97 del Plan Quinquenal de Vivienda. A esta quita se le acumuló el recorte por el tope de ejecución producto del Decreto 90/2020 (15% sobre funcionamiento e inversiones). A eso, le sumaron 1350 millones menos en el 2020, por eso no pudo ponerse en obra un solo realojo, ni un solo proyecto de regularización.
Los asentamientos son una cuestión en disputa en la coalición de gobierno, desde la LUC, el Presupuesto y en esta Rendición de Cuentas. Han mostrado serios desentendimientos, tensiones y visibles conflictos entre los partidos coaligados del gobierno. Estos conflictos no devienen en maneras diferentes de solucionar las problemáticas, que ni siquiera se enuncian. Sus diferencias son sobre la gestión de los escasos recursos asignados.
Para el Frente Amplio intervenir en los asentamientos, invertir en mejorar su infraestructura es prioridad, que tengan mejores calles, alumbrado, plazas, saneamiento, servicios de calidad, pero aún por arriba de esta prioridad, lo urgente es generar otras oportunidades de vida para quienes residen en ellos. La vivienda es necesaria, pero no suficiente para empezar un camino de cambio, de aumentar las posibilidades de trabajo, de mejorar la situación en la educación, de acceder a la cultura, de convivir en paz, de sentirse orgullosos y orgullosas de pertenecer a barrios de fuerte identidad.
El Frente Amplio avanzó, pudo iniciar experiencias de transformación, pero falta muchísimo. Quedan en el país cientos de realidades a las que llegar, hay que corregir errores, hay que involucrar siempre a la gente que vive allí, que conocen sus problemas, ellos deben poder decir las soluciones que esperan. Con el Frente se triplicaron los recursos en los últimos 12 años, pero aún eran insuficientes. Hoy este gobierno los recortó más de la mitad, frenó las obras, reprogramó proyectos y ahondó la incertidumbre.
Podríamos seguir enumerando retrocesos en políticas públicas, pero lo imperioso hoy es informar, poner a disposición de quien quiera leer o acceder a la información, los documentos, ya que esta Rendición de Cuentas es solo un mojón más.
Lo imperioso hoy es fortalecer los lazos de nuestro Frente Amplio, con todas las organizaciones, grupalidades, expresiones populares, para fortalecer la concreta e imprescindible meta de sabernos en la lucha por un país diferente.
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