Por Economiapolitica.uy
Rentabilidad de los Exportadores … ¿y los salarios?
La Rentabilidad de la Industria Exportadora es medida por el Banco Central (BCU) a través de un indicador denominado IEBU (Indicador de Excedente Bruto Unitario de la Industria Exportadora), que relaciona el valor de las exportaciones con los costos de producción respectivos (materias primas, energía y combustibles, remuneraciones). El indicador está disponible en la web del BCU desde enero de 2005.
La Exposición de Motivos de la Rendición de Cuentas 2021 (pg.34) muestra el IEBU como un logro del gobierno y de la política económica, en una clara muestra más del apoyo excluyente a los «malla oro». El componente inclusivo, que la ideología neoliberal denomina «derrame» faltó a la cita, como siempre ha sucedido cuando los gobiernos responden a las gremiales empresariales.
En efecto, si agregamos la evolución del salario real de los trabajadores de la industria manufacturera privada, podremos apreciar que en el transcurso de este gobierno (desde marzo 2020), mientras las ganancias privadas de los exportadores industriales aumentaron un 6%, el salario de «sus» trabajadores descendió 5%. ¿Un logro, Sra. ministra? En todo caso diga para quien es un logro.
LAS EXPECTATIVAS DE INFLACIÓN … ¿Y LA INFLACIÓN EFECTIVA?
En la página 34 se publica una inflación con un resultado aparente y engañoso entre le Tasa de Política Monetaria (TPM) que el BCU utiliza como instrumento antiinflacionario, y las expectativas de inflación que responderían ante dicha política y la realidad económica, con un horizonte de 24 meses. El faltante, el “olvido” aquí radica en nada menos que dejar de lado los resultados reales de dicha política.
Por lo tanto, si agregamos a la gráfica dichos resultados lo que se aprecia es bien diferente: de unas expectativas descendentes pasamos a una inflación efectiva creciente desde junio 2021. En agosto se comenzó a aumentar la TPM, y se lo ha seguido haciendo a tal punto que a julio 2022 está en 9,75%, un aumento de 117% con respecto a un año atrás. SIN EMBARGO, el Índice de Precios al Consumidor, el indicador de la inflación, acumulado en 12 meses se incrementó en nada menos que 27%: en julio de 2021 la inflación acumulada ascendía a 7,3%, y la historia reciente nos da cuenta de una inflación acumulada a julio 2022 de 9,3%.
En definitiva, se intenta esconder un fracaso que le ha costado a la gran mayoría de los uruguayos una importante pérdida en su poder de compra, como lo vimos en la primera gráfica. Se intenta reducir la demanda como si esta se hubiera expandido a la manera en que otros países enfrentaron la inamovilidad de la pandemia durante 2020 y parte de 2021. Recordemos el lugar en el ranking donde la Cepal nos ubicaba en el continente de acuerdo al gasto público realizado para atender a los más afectados por las consecuencias del arribo del Covid 19 al Uruguay: últimos junto a República Dominicana con 0,7% del PIB, el mismo porcentaje que refleja el resultado del fondo COVID durante el año 2021.