Por Andrés Correa
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, decidió sustituir parte del gabinete nacional y dispuso una reorganización del gabinete económico. Sergio Massa, que hasta el 28 de julio se desempeñaba como Presidente de la Cámara de Diputados, asume un nuevo Ministerio que incluye: Economía, Desarrollo Productivo, Agricultura Ganadería y Pesca. Incluyendo también las relaciones con los organismos internacionales, bilaterales y multilaterales, de crédito.
Silvina Batakis será la nueva Presidenta del Banco Nación, Mercedes Marcó del Pont sustituirá a Gustavo Béliz en Asuntos Estratégicos, en la AFIP asume Carlos Castagneto (ex golero de Gimnasia de la Plata, Defensores de Belgrano, entre otros) y Daniel Scioli vuelve a ocupar el cargo de Embajador argentino en Brasil.
La mayoría de los analistas coinciden en que quien se oponía a la llegada de Massa al Gabinete, era el propio Presidente Alberto Fernández. Un tema del que se venía hablando desde la derrota electoral del oficialismo en las elecciones de medio término, ocurridas en octubre del 2021.
Hubo pronunciamientos públicos de dirigentes políticos, sindicales y gobernadores saludando la designación de Massa. Sin embargo es uno de los miembros de la coalición del Frente de Todos más resistidos por sectores militantes, que todavía recuerdan su salida del Frente para la Victoria en 2013 (cuando arma el Frente Renovador) y mucho más su discurso como candidato a Presidente en el 2015 -en el Estadio de Vélez Sarsfield-, prometiendo “barrer a los ñoquis de La Cámpora” y «meter presa a Cristina Fernández». Y ni que hablar el viaje a Davos, junto a la delegación argentina en 2016, invitado por el entonces Presidente Mauricio Macri.
Cabe destacar que la vicepresidenta avala la designación en cuestión y, no es un hecho menor, el éxito en el trabajo de la dupla Sergio Massa-Máximo Kirchner en la Cámara de Diputados. Además, ya en 2018, en una actividad de formación organizada por SMATA y donde coincidirían Hugo Moyano y Cristina Fernández (después de casi siete años de no hablabarse) sobrevolaba la necesidad de concretar un espacio nacional, popular y democrático.
El diputado y sindicalista Hugo Yasky, referente de la CTA, elogió a Massa. Por su parte, la confederación General del Trabajo CGT expresó -en un comunicado- la decisión de «acompañar los cambios en el gabinete impulsados por el Gobierno Nacional”.
Cuando el río suena
El operativo “clamor”, a favor de la designación del dirigente del Frente Renovador en el gabinete nacional, tuvo como protagonistas a gobernadores e incluso referentes de fuerzas políticas alineadas con el kirchnerismo.
Debemos tener en cuenta que Massa no es ningún improvisado, y que buscó el cargo que ahora le es conferido por el mismísimo Presidente. Con aval de la vicepresidenta, que deberá confiar en que el espacio empresarial afín a Massa realizará su aporte para frenar la inflación, liquidar divisas en tiempo y forma, no poner resistencia a los aportes tributarios de los bancos con altísimas tasas de ganancia.
Massa llega a ocupar el control de esta “súper cartera” económica con una economía en progreso, con la actividad económica que muestra un crecimiento interanual de 7,4 %, la desocupación en 7%, y con una reducción de 3,3 puntos porcentuales de la incidencia de la pobreza (en relación al primer semestre de 2021), tanto en los hogares como en las personas según datos del Indec.
Los números que asustan son el 37,3% de personas en situación de pobreza, 8,2 % en situación de indigencia, el 20% de pérdida de poder adquisitivo entre 2017 y 2022 (según informe publicado por el portal web de ámbito) y una inflación del 36% en el primer semestre del año.
Las preguntas que surgen, y habrá que esperar a los próximos días para saber, es si se renegociará el acuerdo con el FMI o habrá una reorientación presupuestaria que sustente el acuerdo vigente. Vale decir que el primer tramo fue cumplido con éxito por Martín Guzman.
Tanto Cristina como Alberto Fernández buscan lograr una desaceleración inflacionaria para octubre – noviembre de 2022 y poder lograr en 2023 un franco descenso en el índice de precios al consumidor, que genere relativa tranquilidad en la población.
Es preciso atender y mejorar la asistencia social a los hogares más perjudicados, por la recesión macrista y la parálisis económica que dejó la pandemia. Se necesitan paritarias sin techo que permitan ir recuperando el poder adquisitivo de las y los trabajadores asalariados. Hasta aquí algunos de los desafíos urgentes.
Los portales Clarín, Infobae y La Nación, dejaron en evidencia los cambios en el posicionamiento político de Sergio Massa. Se puede apreciar cierto descontento con que Massa no haya roto la coalición gobernante. También se percibe que si estos cambios se encaminan bien, le permitirían a Massa un relanzamiento dentro del Frente de Todos y con una muy buena expectativa de cara a las elecciones nacionales de octubre 2023. De no ser así, alguno pondrá distancia.