Por economiapolitica.uy
El sistema de pensiones vigente en Uruguay que abarca situaciones de Invalidez, Vejez y Sobrevivencia (IVS) se rige por un sistema mixto con dos componentes (pilares), Uno de ellos denominado de “reparto intergeneracional”, que administra una parte de los ahorros de los trabajadores en su vida activa a través del BPS, la Caja Militar, Policial, Bancaria, Notarial y Policial (estas últimas conocidas como “paraestatales”).
El otro pilar, denominado de “capitalización individual” es el administrado por las AFAP (Administradoras de Fondos de Ahorro Previsional), compuesto por tres entidades financieras privadas extranjeras (Integración, SURA y Unión-Capital), y una entidad pública (República). Las AFAP cobran comisiones por invertir una parte de los ahorros de forma tal que estén disponibles para solventar el retiro de la vida activa.
El proyecto de Reforma de la Seguridad Social, que abarca solamente al sistema IVS (pensiones y jubilaciones), dentro de las reformas estructurales que plantea, incluye la expansión del sistema AFAP a TODOS los aportantes, con la consecuente reducción del sistema de Reparto. Esto tiene consecuencias muy importantes si se aprueba este proyecto de reforma, ya que TODOS los trabajadores, privados y públicos, pagarían comisiones a alguna AFAP, sea cual sea su ingreso. Sin duda es un gran avance del proceso de privatización de la seguridad social iniciado con la primera reforma en 1996, un negocio muy lucrativo (y sin riesgo) especialmente para las empresas extranjeras que hoy cobran comisiones un 50% más altas que la Afap República. Este tope se modificaría en el proyecto, pero sin consecuencias importantes.[i]
En este artículo constataremos además que la parte de las jubilaciones que pagan las AFAP se viene deteriorando desde 2015, cuando la crisis internacional se generaliza, con lo cual la proyección de dicha expansión del sistema de capitalización no augura buenos resultados en una economía inestable a escala planetaria.
En promedio, en 2021 el Banco de Previsión Social (BPS) cubrió unas 474.300 prestaciones por concepto de jubilaciones, manteniendo la tendencia al alza desde 2009, mientras las AFAP solamente han cubierto su parte en 54.127 casos, muestra de que el sistema aún no ha madurado, pero ya lo quieren cambiar.
Ahora veamos los montos promedios de estas jubilaciones (BPS) y también incorporemos al análisis el monto correspondiente a las prestaciones de las Administradoras de Fondos de Ahorro Previsional (AFAP). Según podemos observar en el gráfico siguiente, el monto de las jubilaciones tuvo una evolución creciente durante una década (2004-2014), asociada a un período de estabilidad financiera y crecimiento económico. Cuando esto cambió, a partir de 2015, el componente de la jubilación correspondiente a lo ahorrado en las AFAP, se estanca primero y luego comenzó a descender. En 2021, dicha pérdida de ingresos con respecto a 2015 es cercana al 10% (-9,5%). Un contexto muy inseguro para resolver ampliar un sistema que está devaluando el ingreso de los pasivos uruguayos.
El componente principal de cada jubilación es el correspondiente al pilar solidario o de reparto intergeneracional administrado por el BPS, que en promedio en 2021 cubrió el 79% de dichas remuneraciones (en 2015, 77%). La “jubilación BPS” también se estancó a partir de 2015, pero no se introdujo en una bajante como el componente AFAP, pues mantuvo su nivel y superó en 2021 la remuneración de 2015 en un 4,3%. Tengamos en cuenta que justamente el pilar de reparto es aquel que en el proyecto de reforma se debilita.
Gráfico 1
En este contexto, las AFAP cobran jugosas comisiones, que constituyen sus principales ganancias, y sin riesgo alguno pues se deducen de los aportes de los trabajadores antes del comienzo de las inversiones. Como vemos en el gráfico 2, si acumulamos las ganancias por comisiones cobradas desde el año 2002, a 2021 totalizan 1.041 millones de dólares, que significan un 6% del total del Fondo de Ahorro Previsional de todas las AFAP. Sin duda un monto muy interesante que podría haberse sumado al total invertido y a generar mejores retiros.
A partir de 2019 las comisiones cobradas anualmente presentan un descenso, en las AFAP privadas pues se en dicho año se puso un tope a la tasa cobrada, en un 50% por encima de la cobrada por la AFAP República. De esta manera, comisiones de las AFAP privadas que alcanzaban un 12% en 2019 de los aportes se redujeron al 6,45%. Y por cierto también todas se vieron afectadas por el estancamiento de los ingresos salariales públicos y privados.
Gráfico 2
[I] AFAP República pierde la capacidad de controlar el tope de comisiones. Ver artículo de Braulio Zelko en https://ladiaria.com.uy/economia/articulo/2022/11/grafico-de-la-semana-seguridad-social-cuanto-cobran-las-afap-por-administrar-los-aportes-de-sus-afiliados/