Por Gabriela Cultelli
Si llamar la atención internacional era la pretensión, vaya que fue lograda. Uruguay y sus escándalos de corrupción están en los grandes medios internacionales, la BBC nos dedicó gran espacio, también The Washington Post, France24, CNN y para mencionar alguno de la región a manera de ejemplo, Página 12, Nodal, y no seguimos nombrando porque se nos iría todo el espacio en ello. Por todas partes se publica el escándalo en el gobierno uruguayo que a estas alturas parece un best seller.
Se nos acusaba a la izquierda en épocas de elecciones de despertar cucos. Por ahora en términos de política económica y del modelo implementado, todo lo que dijimos en la campaña está sucediendo. Lo malo es lo que no dijimos que también está sucediendo: ¿Quién podía imaginarse sucesos como los que están pasando hoy? O al menos ¿Quién podía imaginarse las formas mafiosas en que parecen sustentarse? La realidad supera la ficción decía el escritor, poeta y dramaturgo irlandés Oscar Wilde hace como un siglo y medio.
Un jefe de custodia presidencial muy conocido por el presidente pues prestó servicios anteriores a personas de su familia, parece ser una especie de rey que todo lo puede. Muy a pesar de sus antecedentes delictivos fue nombrado en ese puesto por el propio presidente y además de todo con un maravilloso sueldo de US$ 115 mil mensuales (coimas aparte) según él mismo declaró en entrevista a El País, el 29/11/2022. Eso sí, nadie puede decir que este Sr. no trabajaba, lamentablemente trabajaba día y noche, no cabe duda.
Sobre los hechos, no hay hoy mucho más que agregar, capaz porque estamos en fin de semana y el lunes aparece algo nuevo. Tal vez resumir los hechos pueda ser interesante, ya que son tantos, tan graves y se han dado con tanta velocidad que dificultan el análisis de cualquiera de nosotros (simples mortales). Parece que desde el edificio de la presidencia e involucrando a varios ministerios, se sucedieron una serie de espionajes a favor de empresarios privados con fondos e instrumentos públicos, uso de cámaras del Ministerio del Interior ilegalmente, solicitud y entrega de legajos policiales de varias personas sin claro fin, espionaje a solicitud de una empresa extranjera (yanqui) a senadores y sus familias con objetivos extorsivos, súmese la vigilancia al yerno de Astesiano sin pasar por ninguna instancia judicial, en definitiva tráfico de influencia, comportamientos mafiosos, coimas, amenazas de muerte a otro senador, etc., etc, sin mencionar el pasaje por valija diplomática de 454 kg de pescado congelado sin control alguno que el presidente dijo que eran para “comer”. Se agregan aparentes favoritismos a empresas al menos “amigas” en licitaciones públicas.
Espionajes que solo podrían encontrarse en los obscuros años dictatoriales y los anteriores que le dieron sustento, pero aún se habla de “democracia” en este país. Esa palabra ya nos ocasionaba dudas por los retrocesos en torno a la distribución de la riqueza, porque la democracia es económica en primer lugar. Pero dejemos por hoy de lado esa discusión, y centrémonos en el ataque a los grados de democracia que nos iban quedando.
Se preguntaba al respecto, el compañero senador Daniel Olesker qué pretendían con la información obtenida, se preguntaba si presión o chantaje y a quién, si a legisladores, a periodistas, a estudiantes, a docentes. Porque como el mismo senador frenteamplista decía, a estas alturas la venta de pasaportes falsos a ciudadanos rusos es una “anécdota”, y agregamos nosotros que podría alguien llegar a sospechar que simplemente fueran una entradita extra para estos Sres, y ni hablemos del caso Marset, ya casi ni lo recordamos por más narco que haya resultado. Finalizaba Olesker:
“Y todas estas cosas ¿se creen que son inocuas? ¿A nadie le preocupa la imagen del país? ¿Ustedes creen que esto no va a afectar los índices de democracia y de transparencia a nivel internacional? Ya los está afectando y los va a afectar y va a afectar el riesgo país, porque la economía es economía política y cuando un país empieza a ver condiciones de falta de transparencia, empieza a haber afectaciones sobre la economía. ¿Se creen que los libros de historia dentro de 20 o 30 años no recogerán este suceso como un suceso de vergüenza en la historia nacional? Lo van a recoger. Esto va a ser parte de la historia de esa historia de vergüenza” (sesión extraordinaria del senado 1/12/2022)
Si, sube el riesgo país, lo que implica que sube el costo de la deuda externa, y para que preguntar si alguien va a para por esto, porque por ahora….
Por ahora, se consideró por parte de la fiscalía innecesario indagar en el celular del presidente, aunque cualquiera pudiera pensar que si Astesiano era jefe de su custodia capaz que se comunicaría con él. Sin embargo, El País publica íntegro el interrogatorio aparentemente incisivo que se le hace a María Minacapilli (ex secretaria del ex presidente Mujica), por un trámite correcto y de rutina.
“Las sorpresas continúan cuando (se refiere a la fiscal) admite que en el pedido cursado a Policía Científica para que obtuviera el contenido del celular de Astesiano pidió expresamente que se excluyeran los intercambios entre el presidente y el indagado” escribe una periodista de la Diaria, Soledad Platero, el 3 de diciembre (“La mano del rey”).
En la sesión parlamentaria mencionada el compañero Pacha Sanches calificaba los sucesos como el “hecho mas terrible de crisis institucional, sin precedentes en la historia”. Es que, si se llegara a probar todo esto, si se aclararan todas estas conversaciones e intercambios por WhatsApp, si realmente se pudiera avanzar en la investigación, hay que tener claro que por mucho menos renunciaron presidentes. Por ejemplo, fue el motivo final que impulsó la renuncia de Richard Nixon en agosto de 1974 en EEUU (el escándalo Water Gate que menciona el título de este artículo). Claro que a mediados de 1974 estábamos a 8 meses de la derrota del imperialismo en Vietnam y las movilizaciones populares internas contra la guerra eran gigantescas, que la crisis mundial de 1975 ya se vislumbraba, pero es cierto también que el puntillazo final de la renuncia de Nixon fue el descubrimiento de espionaje en la sede del partido opositor (Demócratas), donde prácticamente todo el gobierno del Partido Republicano estuvo involucrado. Al respecto hay una excelente y recomendable película que relata los hechos, “Todos los hombres del presidente» de Alan Pakula con Robert Redford y Dustin Hoffman, esta buena para volverla a ver en estos días tan aciagos.
Pero todo esto transcurre al tiempo que cobrando 10 mil dólares por su trabajo el abogado De Brum, docente de la Universidad Católica, quien fuera suplente de Eguiluz de Cabildo Abierto, negara 3 informes de jurídica del Instituto de Colonización que sostienen que Manini Ríos es Colono. Aunque mucho más sucede en estos tiempos: Reforma jubilatoria y Reforma Educativa anti populares, privatizaciones neoliberales de bienes y funciones públicas, graves posturas internacionales separatistas del MERCOSUR y la región, entre otros temas gravísimos.
Se abrió la caja de Pandora
Lamentablemente parece haberse abierto una caja de Pandora. Según la leyenda, al abrir Pandora la caja, escaparon de ella todos los males, aunque algo quedó resguardado en su fondo.
De hecho, se conocen las suertes cuando se cuenta con un estado ausente, cuando se termina armando una especie de estado paralelo conformado por corporaciones que poseen dominio territorial y un accionar sistemático y organizado, sumados a modelos neoliberales, y de marcada desigualdad, como se ha dado en regiones o países de la América Latina. Vienen por ejemplo a nuestra memoria escritos de Rita Segato y la manifestación de estos fenómenos en los cuerpos de las mujeres. Vienen también al recuerdo otros tiempos obscuros de nuestra historia.
Cuando antes el país se creía “La Suiza de América” se pensaba que no podía pasar lo que estaba pasando, por esa idea que nos imponen y que alguna gente acepta de sentirse separada de este continente, y sobre todo de nuestros vecinos Brasil y Argentina. Pero decía Benedetti en su obra “El País de la cola de paja” ensayo increíblemente editado en 1960, advirtiendo ya la segunda etapa de la crisis: “Estamos viviendo la segunda etapa de la crisis. En la primera, el hombre con escrúpulos morales no daba ni recibía coimas, solo el inmoral las aceptaba. En esta segunda etapa que vivimos, el hombre con escrúpulos morales sigue resistiéndose a recibir coima, pero en cambio se siente empujado a darla […] al solo efecto de no verse infinitamente postergado”. A eso es lo que tememos en un mundo ciertamente mucho más peligroso que aquel.
Pero la caja de Pandora, como decíamos antes y según la leyenda, guardó algo que no se le pudo escapar: la esperanza. Por eso creemos en la fuerza de las palabras del compañero Pacha Sanches cuando dijo: “Vamos a ir hasta el final y vamos a ser implacables, porque en una República nadie tiene coronita, aunque algunos piensen lo contrario” pues es la única manera de resguardar los pocos grados de democracia que aún tenemos.