Por EconomiaPolitica.uy
Ec. Claudio F. Caetano
Dibujo: Prof. Adán Iglesias Toledo
El salario real es un indicador del poder de compra del salario nominal, es decir, nos indica cuanto se ve afectado el salario por el aumento de precios en determinado período de tiempo.
Mensualmente el INE publica un índice de salario real (ISR) en base a sus dos componentes: el índice medio de salarios (IMS) y el índice de precios al consumo (IPC).
Este índice permite visualizar en sus variaciones, si aumentó o disminuyó el poder de compra del salario promedio en relación a la canasta de consumo que resulta de la encuesta de gastos e ingresos que también esa institución elabora.
En relación a ello, el Ministro de trabajo Pablo Mieres afirmó via twitter y algunos medios de prensa, que el salario real en 2022 había aumentado y que se estaba cumpliendo con el compromiso de comenzar la recuperación. Sin embargo, las cifras oficiales publicadas no dan cuenta de que allá sucedido así.
El siguiente gráfico muestra la evolución del salario real tomando como base el año 2019, año pre pandemia y último año del gobierno frenteamplista.
Se observa que en los 15 años del gobierno del Frente Amplio el poder de compra del salario aumentó consecutivamente, alcanzando un crecimiento del 63,2% en todo el período. Por el contrario, en los tres años de gobierno de la coalición multicolor hubo caídas consecutivas del salario real que ya acumulan un 3,7%. Concretamente, el año 2022 presentó una caída del salario real promedio anual del -0,6% respecto al 2021, acumulándose a la disminución que presentó en 2021 del 1,5% respecto al 2020 y la caída del 1,7% del 2020 en relación al 2019.
Las tres caídas consecutivas del salario real en los últimos tres años no presentan una senda de crecimiento, sino por el contrario, un alejamiento cada vez más acentuado de los valores del 2019. El 2022 presentó una disminución del poder de compra del salario de 3,7% en relación al 2019.
La base de las afirmaciones del ministro de trabajo y seguridad social sobre la recuperación salarial pasan de explicar el aumento anual tomando únicamente lo que resultó en diciembre de 2022 respecto a diciembre de 2021, es decir lo que se denomina
la variación punta a punta. Si bien es cierto que comparando únicamente esos meses sí hubo un aumento del 1,03%, ese valor no refleja que durante nueve meses del 2022 hubo pérdida en el poder de compra, por tanto, no refleja fielmente lo que sucedió durante todo el año, que como se señaló anteriormente, en promedio, siguió la tendencia de caída del salario real.
Comparar los promedios anuales implica tomar en cuenta el comportamiento de las variables durante todos los meses del año, dejando así las variaciones puntuales que puedan ocurrir en algún mes en particular y sesguen las conclusiones. ¿Será que el ministro no lo sabe?
Mas allá de lo relacionado al tipo de medición del indicador, en ninguna de las dos formas de cálculo se obtiene como resultado un nivel del salario real que se acerque al del 2019. Y esto tiene un sentido opuesto al comportamiento de la riqueza producida expresada en el crecimiento del PBI. Por una parte, la producción ya recuperó los niveles pre pandemia, mientras que el salario no lo hizo, por tanto, el desarrollo del modelo económico sigue expresando mayores niveles de desigualdad, donde continúan acumulándose las ganancias del capital.