Por economiapolitica.uy (*)
Héctor Tajam (**)
Dibujo Prof. Adán Iglesias Toledo (***)
Si bien en el año 2002 el sector financiero tuvo su principal participación en la generación de la producción (9,1%), en promedio en lo que va del siglo XXI ha sido de 5%, el menor desde los años 70 del siglo pasado (Cuadro 1).
En efecto. En 1957, el año anterior al comienzo del primer ciclo de gobierno del Partido Nacional, el sistema financiero representaba solo el 4% del valor generado en el país, y al final de dicho período había crecido al 5%. Este registro se mantuvo hasta el año previo a la dictadura. El proceso de la dictadura cívico militar significó una fuerte apuesta a los servicios, entre ellos los financieros, por lo cual en el año 1984, primera elección nacional desde 1971, el sector financiero ya daba cuenta del 8% del PIB de ese año. En 1978 se llevó a cabo la liberalización financiera, que junto a la tablita y a la compra de carteras fueron los instrumentos de la extranjerización de la banca en Uruguay.
Luego de la década perdida de los años 80, se sucedieron las políticas neoliberales practicadas por los gobiernos alternos del Partido Colorado y del Partido Nacional hasta 2004 (Sanguinetti – Lacalle – Batlle). En esos años, se destacó el gobierno de Luis Alberto Lacalle Herrera, que inició la carrera hacia el abismo de la crisis de 2002. En este período terminó procesado y en prisión hasta el ministro de economía, Cr. Enrique Braga, por los escándalos en la venta de bancos en quiebra, en particular el Banco Pan de Azúcar (intervenido en 1985), vendido al banquero francés Stephane Benhamou. Los gobiernos colorados que le sucedieron empeoraron la situación, desembocando en una debacle financiera de tal porte que sumió al país en la peor crisis de su historia.
En 2005 el Frente Amplio inició un ajuste en el sector financiero, con señales claras de que los salvatajes de bancos quebrados se habían terminado, y fortaleciendo el sistema de protección de los depósitos con la creación de la Corporación de Protección del Ahorro Bancario (COPAB) en 2008. En forma paralela se rescataron los bancos estatales BROU (Banco República, banca comercial) y BHU (Banco Hipotecario) que estaban técnicamente quebrados. Sin embargo el sistema financiero, público y privado, descendió su participación en la generación de valor en un contexto de alto crecimiento económico y de flujos financieros de inversión extranjera directa que sustituyeron a los especulativos llegados en al última década del siglo XX.
En 2019, al final del ciclo de gobiernos del Frente Amplio, el sector financiero representaba el 5% del PIB de ese año en pesos corrientes (en 2004, el 6%). A su interior, el sector estatal se constituyó en el 44% del total, pero solamente con dos instituciones, en el segmento comercial el BROU (39%) y en el hipotecario el BHU (5%). En la banca privada sobresalían Santander, ITAU y BBVA, que en conjunto dominaban el 50% de los montos de préstamos y depósitos sumados (Cuadro 2).
A partir de 2020 la banca estatal comienza a perder participación, especialmente en el mercado de seguros, un resultado coherente con la filosofía de la coalición gobernante de ampliar espacios al capital privado. De esta manera, las instituciones financieras estatales a setiembre de 2023 habían caído a un 41% del total de préstamos y depósitos, BROU a un 37% y BHU a un 4%. Si lo midiéramos en dólares, si la participación en el mercado se hubiera mantenido en los registros de 2019, los bancos estatales hubieran accedido a un volumen adicional de depósitos y préstamos de 145 millones de dólares, 130 millones el BROU y 15 millones el BHU.
Por otro lado la banca privada aumenta su participación en la actividad financiera, en 2019 ya supera el 50% y en 2023 ya está por encima del 55% del manejo de préstamos y depósitos. Los bancos que más crecen en este corto período son ITAU, Santander y HSBC, mientras los 4 grandes privados que ya vimos ascienden en conjunto al 53% del global.
(*) EconomiaPolitica.uy es un Programa de asesoramiento, investigación y formación en Economía Política.
(**) Héctor Tajam es Economista, Director del Programa EconomiaPolitica.uy y Columnista de MateAmargo. Fue Diputado (2005/10) y Senador (2010/15) por el MPP – Frente Amplio. Miembro del Capítulo uruguayo de la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad (RedH)
(***) Prof. Adán Iglesias Toledo, Director del Medio humorístico DEDETE del Periódico Juventud Rebelde, miembro de la UNEAC. Colabora con varios medios de prensa en su país y en el extranjero.