Por Andrés Correa (*)
Dibujo: Adán Iglesias Toledo (**)
La velocidad de los acontecimientos, el arrebato de decisiones gubernamentales, la incertidumbre del presente, el vértigo de la política y la economía argentina, sumado a las diatribas presidenciales es producto del febril reparto de las palancas sobre actividades estratégicas del país, repartidas entre intereses particulares. Es también un robo al bolsillo de los y las trabajadoras vía inflación, y que termina en la cuenta de los más grandes empresarios de la Argentina.
Mal que le pese al gobierno, el pueblo en las urnas en octubre del 2023, en un 90 %, votó por tres fuerzas políticas (Unión por la Patria, La Libertad Avanza y Juntos por el Cambio) que configuran la actual representación parlamentaria, vale recordar que cada referente de dichas fuerzas recomendaban no votar a la otra.
El parlamento expresa la pluralidad que tiene la sociedad argentina. Sin embargo, el Poder Ejecutivo avanza con una corriente de ideas e intereses de minorías que traban el desarrollo de las fuerzas productivas, explotan al pueblo y ponen en riesgo la disolución nacional. Ganar un balotaje no es lo mismo que convertirse en dueño del país.
Durante una conferencia organizada por la Universidad de Harvard, Federico Sturzenegger afirmó que en Argentina existen «grupos de interés» que controlan los recursos de la población y enfatizó la necesidad de «empobrecerlos» para poder llevar a cabo una reforma en la estructura política y económica del país. Apunto contra los sindicatos, la industria nacional, particularmente textil y pesquera.
La nueva administración redujo la cantidad de ministerios de veintidós a sólo nueve, concentró en menos funcionarios mayores incumbencias. Además, miles de trabajadores estatales fueron y seguirán siendo despedidos, y existe una deliberada abulia que se instaló en numerosas reparticiones estatales que continúan acéfalas o funcionando a media máquina.
El sueño refundacional de Javier Milei como presidente es instalarse por decreto, con clara muestra de una avidez desenfrenada, para arrasar en tiempo récord con lo que conocimos como Estado argentino.
Las corporaciones, la familia militar y las fundaciones
El plan libertario no se puede subestimar porque detrás suyo está el poder real, con los grandes estudios de abogados, que trabajan desde hace tiempo en un esquema que maximice sus beneficios y conocen a la perfección todos los nudos de la burocracia estatal que ahora el derecho corporativo intenta desatar.
Ni bien se encaramaron en el gobierno, los libertarios anunciaron dos ambiciosas iniciativas: el Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 frenado en buena parte por la justicia y el proyecto de Ley Ómnibus que chocó en el parlamento y ahora pretenden volver a ponerla en la ruta. Y ahora el anuncio del Pacto de Mayo que rememora los diez puntos del Consenso de Washignton. La magnitud de las normativas evidenció el trabajo estratégico de un equipo corporativo dedicado a crear las bases para un nuevo proceso de reorganización nacional, destinado a empoderar capitalismo financiero.
Un trabajo realizado por el Equipo de Investigación Política (EdIPo) en el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), y publicado en el número 61 de la Revista Crisis (1) “intenta delinear la fisonomía de una administración sui géneris a partir de la procedencia de los 100 principales funcionarios que integran el gabinete de Javier Milei
El informe destaca el lugar que ocupan en primer orden los hermanos Milei, en segunda instancia los equipos de Patricia Bullrich, la tercera línea, aunque un poco relegada, es para la vicepresidenta Victoria Villarruel, heredera de la tradición nacionalista reaccionaria.
La Fundación Libertad es la sucursal en Argentina de Atlas Network. También la Fundación Libertad y Progreso presidida por Alberto Benegas Lynch e integrado por la Canciller Diana Mondino. Otra fundación es Friederich Naumann que integra José Luis Espert (autor de la frase cárcel o bala) dedicada al fomento del liberalismo económico.
La investigación propone distinguir diversas corrientes de las que el actual Gobierno extrae ideas, cuadros y recursos. Núcleos que operan de manera transversal y flexible:
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El mundo empresario-corporativo.
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La gran familia militar.
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La red de fundaciones de ultraderecha.
Según el Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (Cifra) (2), Techint es el grupo económico que más funcionarios ha colocado en el gobierno de Milei. En un informe especializado, durante las primeras semanas de la administración libertaria, Rocca ubicó al menos siete ejecutivos de su empresa, principalmente en el área energética, lo que representa algo más del 40% del total de funcionarios con origen empresarial, también de la Corporación América de Eduardo Eurnekian provienen varios altos funcionarios, desde Nicolás Posse, Jefe de Gabinete y del propio Milei.
Eduardo Elsztain (dueño de IRSA) es otros de los empresarios cercanos a Javier Milei, que no sólo se sumó a los festejos de asunción presidencial del libertario, sino que lo albergó en el Hotel Libertador de su propiedad. Elsztain también es dueño de los centros comerciales y de convenciones más conocidos del país, además de ser uno de los terratenientes más grandes de Argentina.
Elsztain es importante en la conversión al judaismo del presidente, que en su discurso inaugural realizó varias referencias a esa religión. El dueño de IRSA fue quien le abrió las puertas al líder libertario para vincularse con la ortodoxa Jabad Lubavitch.
La persona que le abrió las puertas de la Jabad Lubavitch no formó parte del viaje a Nueva York para visitar el Ohel, que hace referencia al espacio que alberga las tumbas de Menajem Mendel Schneerson y su suegro y predecesor Yosef Yitzchak Schneerson, que antes de asumir la presidencia, hiciera Milei acompañado de su hermana Karina y el empresario Gerardo Werthein, quien a la postre sería el embajador de Argentina en EEUU.
Un dato que arroja la investigación de Edlpo y el CELS, es el avance de militares de las tres armas en puestos claves de la de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), según lo que diseñó el gobierno de la utraderecha. La última vez que tuvo lugar una intervención castrense de tal magnitud en inteligencia del estado, fue durante la dictadura bajo el régimen de Jorge Rafael Videla
El gobierno libertario tiene claro que el brutal ajuste es con violencia estatal y persecución judicial a dirigentes de la gestión anterior. El Poder Ejecutivo cuenta aún con apoyo social, aunque sin movilización. El conflicto social se agudizará. El gobierno tiene apoyo empresarial, aunque cuenta con varias disputas internas. Los días por venir tal vez puedan confirmar la solidez o la fragilidad de la prepotencia oficialista.
Notas:
(1) https://informes.revistacrisis.com.ar/mapa-politico-gobierno-milei/
(2) https://centrocifra.org.ar/
(*) Andres Correa, Periodista argentino-uruguayo, director y conductor principal del Programa Radial «De Fogón en Fogón», corresponsal de Mate Amargo en Buenos Aires.
(**) Prof. Adán Iglesias Toledo, Dibujante gráfico cubano, Director del Medio humorístico DEDETE del Periódico Juventud Rebelde, miembro de la UNEAC. Colabora con varios medios de prensa en su país y en el extranjero.
