Por Ricardo Pose (*)
A la sombra de los flashes, fuera de foco en las selfies de los actos partidarios, rajadura en la pared tapada por el afiche de los candidatos, algo se sigue moviendo y buscando respuestas a los temas que desde siempre siguen necesitando respuestas como el acceso a la Tierra, a la Vivienda, al trabajo, al entorno.
Y esa nueva construcción de comunidad tiene como arcilla fundamental de su obra a los militantes que jerarquizan su tiempo como “albañiles” de esa nueva construcción, depositando su energía en ubicar en un mismo escalón a los desocupados, a los que asisten a las ollas populares, a los que viven a la intemperie, a los que buscan formas amigables de producción de la tierra y el mar.
Sobre fines de agosto se dio el Segundo encuentro de Organizaciones Construyendo Comunidades y nuevamente hablamos con Camilo Álvarez (C.A.) que expuso lo allí vivenciado.
C.Á. El segundo encuentro construyendo comunidades comenzó el viernes 30 de agosto e hicimos la apertura en la tardecita lluviosa, ahí en El Recreo, en la ciudad vieja.
Finalmente, las organizaciones que se hicieron presentes, además de las organizadoras que eran el Centro Martin Luther King de Uruguay y el de Cuba, Somos Barrio y el Frente Patria Grande Argentina, se sumaron también compañeros del MST (Movimiento de los Sin Tierra) de Brasil, del Foro de las Periferias, que es una experiencia de trabajo comunitario y social en Porto Alegre, y compañeros también de distintas organizaciones de Uruguay. Y ahí le dimos comienzo.
Participaron organizaciones vinculadas al tema calle, organizaciones vinculadas al tema ambiente, como Redes Amigos de la Tierra, participaron compañeros y compañeras también de las Ollas Populares. Así que ahí un poco el despliegue se dio en función de lo esperado, y a pesar de la lluvia, superando las expectativas.
El domingo 1 de setiembre, al mediodía hicimos el cierre en el sindicato de Aute, un poco viendo los lineamientos y los intercambios tenidos y proyectando de cara a los trabajos que se vienen en los próximos meses, como ir construyendo comunidades.
¿Cuáles fueron los ejes si bien vos me decías antes que la idea no era arribar necesariamente a conclusiones o definiciones, qué elementos quedaron expuestos?
C.A. Básicamente hubo cuatro temas que fueron centrales y que estuvieron arriba de la mesa, en los espacios de intercambio y de discusión.
Uno tiene que ver con el tema de la situación calle, que se abordó a partir de buenas experiencias que se están desarrollando en distintos países para trabajar este tema. Configurando también esta lógica de poder compartir experiencias que hacen a atacar las causas, además de trabajar en las consecuencias de lo que es la situación calle, pero también experiencias que impacten en atacar las causas, visto como un problema regional que se está dando, que también nos hace pensar en términos de cómo nuestras sociedades, producto de una deshumanización creciente que va generando estos procesos de personas viviendo en situación calle, que hay que atenderlo sin duda de manera integral, y que las causa también hay que atenderlas en la diversidad que las generan, para no caer en reduccionismos fáciles.
Otro de los temas que tuvo sobre la mesa fue todo lo concerniente a lo ambiental, y cómo el ambiente y también la energía juega un rol preponderante en los procesos de integración regional, como también las organizaciones sociales y comunitarias, los tenemos sobre la mesa y lo colocamos en términos de que puedan ser elementos centrales para pensar formas de integración que tengan en cuenta el Cuidado del Ambiente no sólo en términos de literatura, sino el Cuidado del Ambiente en términos de procesos de desarrollo nacional que permitan colocar ese tema justamente atendiendo a las necesidades de cada uno de los países. Y esto estuvo también mucho sobre la mesa, como la integración regional es una necesidad, una forma de reforzar los proyectos nacionales también.
Otro tema que estuvo sobre la mesa tuvo que ver con lo que hace a las formas que nos damos distintas organizaciones en distintos países para construir procesos que son participativos, colectivos, desde una mirada que incluye lo político, que no se para por fuera de la política, que lo incluye, que lo entiende, que lo atiende, que reconoce esos procesos además como necesarios para avanzar en derechos y en mejorar la calidad de vida, pero atendiendo que esos procesos también tienen que mirar el desarrollo de la participación social y popular, el desarrollo y la construcción de poder popular en las comunidades, que hagan que dejemos de ser simple testigo y observadores de la realidad y podamos ser actores que definan cotidianamente.
Y ahí, bueno, como último tema que también estuvo muy fuertemente colocado, tenía que ver con, bueno, en el marco de los diagnósticos que se pueden hacer y de las cosas que se vienen realizando de las organizaciones, cómo entender esto de lo que nos hace humanos, cómo construir y aportar también a la construcción de un proyecto que nos pueda hacer y dejar ser humanos. Y en ese sentido, esta posibilidad de encontrar dos, tres, cuatro puntos que nos reúnan en términos de poder trazar una práctica común y no perdiendo el tiempo en discusiones que van a ser eternas si nos ponemos a ver cuáles son esas diferencias. Y ahí en ese sentido veíamos que el tema de la tierra, el tema de la lucha por la tierra, el tema de la lucha por el trabajo, el tema de la lucha por la vivienda y el tema de la lucha contra la pobreza, sin duda que resumen un buen conjunto de lo que necesariamente nos tienen que hacer humanos, al menos desde la materialidad para poder pensar en el desarrollo de sociedades más justas.
¿Esos temas que ustedes enfocan como ejes principales, los enfocan porque entienden que son los énfasis que ustedes entienden imprescindibles o porque son de los temas que en realidad no forman parte de los primeros puntos de la agenda en el debate político partidario?
C.A, Nosotros creemos que son temas imprescindibles y además entendemos que en la agenda partidaria muchas veces están sobre la mesa y lo que planteamos nosotros es que hay que reforzar las luchas; un poco lo que planteamos es que la política tiene que ser una posibilidad, una virtud de todos, y en ese sentido acumular en función de las perspectivas estratégicas que están al alcance, y en cada momento histórico toca trabajar de distintas formas.
Hay proyectos que los contemplan estos temas y que lo han contemplado sin duda, y tal vez hay otros proyectos en otros lugares que no lo contemplan. Lo que sí decimos es sobre estos temas entendemos que puede haber un acuerdo bastante amplio entre los sectores sociales y los sectores políticos partidarios, y consideramos que hay que traccionar en ese sentido porque es la forma de solucionarlos, porque además tampoco la idea es solamente ser testimonio de que eso sucede, sino poder trabajar con quien esté dispuesto para solucionar esos problemas.
¿Cómo sigue la construcción de éste espacio?
C.A. Nosotros veníamos funcionando con una coordinación política y construyendo comunidades que ya venía del 2022, producto del primer encuentro. Ahora bueno, al acercarse más organizaciones comenzamos un debate también de colocación de algunos temas para generar un acuerdo más estratégico y en función de eso poder tal vez en un mes, un mes y medio, tener una instancia seguramente virtual para definir algunas áreas de trabajo que son importantes en esto también de no estar generando estructuras que terminan quitando tiempo a compañeros y compañeras en vez de generar procesos que impulsen a la militancia. Entonces seguramente en los próximos meses vamos a estar generando algunos espacios de trabajo comunes y bueno, también vamos a estar definiendo dónde y en qué condiciones y con qué características se va a desarrollar el encuentro de construcción de comunidades del 2025.
(*) Ricardo Pose es Periodista en Caras y Caretas, Presidente sector Prensa Escrita (APU). Columnista en Mate Amargo, CX 40 Radio Fénix, Radio Gráfica, Tierra de periodistas Rocha FM, Notero en Telesur y tvg China