Por Ramón Pedregal Casanova.(*)
Las cúpulas neoliberales agotan ante el mundo su crédito conforme hablan del “uso democrático”, a pesar de que hoy dejan ver a los ojos del mundo su esencia, eso que antes ocultaban de su cuenta de haber multinacional.
Se han negado a colaborar en la Conferencia de Estados Parte del Tratado sobre Comercio de Armas de la ONU, sus intereses crecen en los genocidios y el dominio del mundo, no quieren Acuerdos, no quieren Tratados, no quieren Leyes Internacionales, quieren la guerra más destructiva porque sus otras formas de presión, chantaje, sometimiento, crímenes selectivos, guerras mediante proxis, ejércitos mercenarios, ya no les da resultado. Su crisis económica es irresoluble dentro de su sistema y los días 22 y 23 de octubre hay una alternativa para el mundo que quiere ser libre de opresión del “occidente global”, estadounidense, británico y de la UE. Los días 22 y 23 de octubre se va a celebrar la reunión que presenta al mundo la alternativa multilateral de los BRICS, su significado hace sombra al neonazismo de “uso democrático” imperial.
¿No es la neocolonia “Israel” la representación fiel del plan del imperio? El genocidio, la destrucción, el neocolonialismo sobre el mundo. Su inversión en el ente colonial sionazi, hasta marzo de 2024, es de 330.000 millones de dólares, y desde entonces han puesto remesas de otros tantos miles de millones, 20.000, 17.000, 8.000, son las últimas cifras que he revisado, un informe sobre el armamento que han puesto en manos sionazis hasta el 1 de marzo, lo tienen aquí: https://www.aa.com.tr/es/mundo/-c%C3%B3mo-ha-extendido-eeuu-el-apoyo-militar-a-israel-su-mayor-aliado-en-oriente-medio/3148368 , ¿cuánto más han enviado desde entonces?, ¿y todos los colaboracionistas del genocidio?
Se comprueba en cada imagen que se les escapa por las redes sociales que su criminalidad la han llevado a las cimas más profundas de la Historia, cuantos más días transcurren sus asesinatos son más horribles, destruyen Gaza, Líbano, Siria, Irak, Yemen, y buscan reventar Irán, por boca de Netanyahu dan órdenes para que veamos lo que son capaces de hacer.
Pero también hay que hacer un capítulo para su economía interior: las empresas que se habían instalado en el territorio colonizado se les queda vacío, en el año transcurrido de guerra contra el Pueblo de Gaza más de 46.000 empresas se han marchado del ente colonial; la calificación crediticia, los bonos del ente que representa a las elites globalistas del imperio, han caído al nivel de bono basura; la inversión extranjera se ha retirado en más de un 60%; las tecnológicas internacionales empiezan a cerrar sus sucursales; Intel ha cancelado la inversión prevista de 25.000 millones de dólares;…, pero no creamos que todo se va a parar porque les planteen problemas algunos de sus aliados, hay regímenes que les niegan de palabra pero les sirven, tienen los puertos cerrados, pero Arabia Saudita, Emiratos Árabes, Jordania, forman un corredor por el que entregan las mercancías que no llegan a los puertos marítimos, Pregunto: ¿qué gobiernos envían carbón a las centrales eléctricas del ente colonial?
La red eléctrica sionazi se alimenta con carbón en un 22% y de ello dependen los asentamientos coloniales, las fábricas de armas y la infraestructura que han dispuesto para realizar la guerra contra el pueblo de Gaza.
Los sindicatos palestinos hicieron un llamado a la solidaridad internacional para que la clase trabajadora boicotease a la entidad invasora de Palestina, y el llamado llegó al sindicato minero del carbón de Colombia, y los mineros respondieron como es debido entre la clase obrera, los mineros se sumaron denunciando la colaboración sionazi con el paramilitarismo que tantos crímenes han perpetrado y aún realiza en su país, y alzaron la voz para que la clase trabajadora del mundo detuviese “la producción de metales, minerales y combustibles que se utilizan en estas guerras … el planeta está al borde de una nueva guerra mundial y son los trabajadores quienes pueden detener la amenaza contra la existencia de la raza humana y tienen la obligación de hacerlo”.
Las multinacionales que explotan el carbón colombiano en un 90% son la suiza Glencore y la estadounidense Drummond, que además mantienen la explotación asesinando con bandas paramilitares a campesinos, indígenas, ambientalistas y sindicalistas.
La llamada al boicot de las organizaciones palestinas consiguió una huelga mundial contra la Glencore y que se exigiese al presidente de Colombia no seguir colaborando con el ente colonial sionazi y se dejase de enviar carbón. La acción de la clase trabajadora hizo que decretase la suspensión del envío. ¿Y qué debemos decir de Sudáfrica que, a pesar de su denuncia del genocidio que realiza la base del imperialismo en Gaza sigue entregándole un 9% de su carbón, o Brasil que le surte de petróleo?
Los datos expuestos aquí los aporta Rula Jamal, abogada y defensora de derechos humanos en Jacobin el 17/06/2024.
¿No es la neocolonia “israel” la representación fiel del imperio? La guerra mundial del neoliberalismo, el sionazismo y sus compinches que envían dinero, armas, mercenarios, y lo que no puede entrar en sus puertos lo hacen llegar por avión o carretera por varios países árabes, esos defensores del sionazismo del que dicen que “tiene derecho a defenderse”, esos que están empleados para trabajar con todos los lenguajes del arco capitalista imperial, desde el de la vieja y conocida ultraderecha hasta el de la que tiene la lengua bífida para ocultarse como “izquierda”, esa se mueve como una culebra en las aguas del “uso democrático”, “izquierda” neoliberal, “izquierda” de celofán, infiltrada y por eso repetidora de su ideador woke. Por si no queda suficientemente claro que el “uso democrático” en EEUU el 5 de noviembre es para nombrar el recambio de Biden el carnicero, todos los congresistas del “mundo global occidental”, todos pagados por el lobby sionazi AIPAC, juegan a la confusión pública de la guerra, mientras los fabricantes de armas imperiales hacen cálculos de cómo y cuando les es más lucrativo que su banda militar sionazi ataque a Irán, … para eso han llevado portaaviones, submarinos, toda la flota frente a las costas de Libano.
Es más urgente que nunca tomar las calles, echar a los gobiernos colaboracionistas, llevar a todos los niveles el Boicot, la Desinversión y las Sanciones al ente sionazi y sus colaboradores de todos los tamaños neocoloniales del imperio.
(*) Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia; Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente de AMANE. Miembro de la Asociación Europea de Apoyo a los Detenidos Palestinos. Miembro de la Red de Artistas, Intelectuales y Comunicadores Solidarios con Nicaragua y el FSLN. Colaborador del canal Antiimperialistas.com, de la Red en Defensa de la Humanidad.