Por Darío Rodríguez (*)
Hasta antes de las elecciones de octubre y el ballotage del mes siguiente, el entonces intendente de Paysandú, Nicolás Javier Olivera, hoy Senador, descartaba recrear la Coalición Republicana de cara al 11 de mayo. Además, fundamentaba su decisión, haber ganado con margen en el 2020, pensar que tenía una buena gestión y que el PN repetiría a nivel nacional, lo envalentonaron.
La buena performance del FA en Paysandú y el retorno de la izquierda al gobierno nacional, hicieron que el PN pusiera la “bardas en remojo”. Olivera tomó nota y pasó de la euforia al nerviosismo y la preocupación lo hizo cambiar de idea y salió a buscar acuerdos con el PC o con algunos dirigentes de esa colectividad.
Con paño
Esta gestión Departamental se caracterizó por traer a la Fundación correligionaria a Ganar, un fin de año, entre gallos y medianoches, para achicar la plantilla de funcionarios de los CAIF a sus cargos y por esa vía evadir aportes al BPS. También de la mano de la Fundación llegó un procesado, en su momento, por proxenetismo, que el gobierno Departamental, en tanto militante, retuvo hasta que pudo. El año pasado saltaron otros casos.
(Chofer, de la Intendencia y de lista de Olivera, en su momento procesado, traía 10 kilos de cocaína)
La administración tuvo la suerte que llegó con una Intendencia financieramente saneada y con un fideicomiso por 25 millones de dólares y una cuarentona de obras propuestas que, el jerarca, establecería las prioridades. De esa cifra, un 20% – 5 millones de dólares- se distribuirían en el interior con acuerdo de Municipios y Juntas.
(Olivera, una gestión con denuncias)
Nada de esto aconteció, por el contrario, el intendente contrató al estudio OMA (Oficina de Arquitectura Metropolitana) del arquitecto holandés Rem Koolhaas con sede en Nueva York con el propósito que éste elaborara un plan transformador del borde costero. Por estos días se instrumenta parte de lo pautado por OMA: el Sendero de la Costa. El lujo, en un Departamento con 6 mil desocupados, bajos salarios, miles en la informalidad, enorme contingente revisando volquetas e incremento de la inseguridad costó 1 millón 300 mil dólares. El contrato está sustraído del conocimiento público. Está bajo siete llaves.
En estos días se agregan seguro de paro en Paycueros, una empresa poco afecta a la sindicalización, y 450 trabajadores que quedaron en la calle por el cierre de Fricasa. La comunidad de Casa Blanca sentirá el impacto; un golpe en la nuca.
(Ver detrás de las máscaras)
El intendente Olivera voceaba siempre los recursos del fideicomiso eran recursos extraordinarios “para obras extraordinarias”. Algunas de las mismas, que se podrían ejecutar con el presupuesto normal, son objeto de cuestionamientos tanto por su forma de realización como por su monto. Entre dos obras, -remodelación de Plaza Constitución y Estadio Cerrado 8 de junio-, se consumieron 9 millones de dólares del fideicomiso. Habrá que ver el costo que tendrá el Sendero de la Costa.
El fideicomiso preveía la utilización de 1.5 millones de dólares para desarrollar programas sociolaborales. Recién ahora, con tinte electoral, la Intendencia, por unos meses, -algo similar hará la de Rocha-, desplegará un programa parecido a los Jornales Solidarios; a su costo.
(R. Magritte. Fuera de lugar)
La IDP, depende presupuestalmente, de un 40% de los recursos que vienen del gobierno nacional; no obstante, en este quinquenio creció el déficit, pese a los galimatías que se ensayan.
Mientras las obras se desarrollan, varias policlínicas de ASSE, -esto merecería otra nota-, han cerrado por el estado desastroso de sus locales y ausencia de recursos para repararlas. La ministra de Salud, Cristina Lustemberg, en reciente visita tomó nota de la situación. En su momento, Mario Díaz, ex secretario general de la IDP y uno de los tres candidatos del FA para mayo, -que cuenta con apoyo de la 609-, expresó en la inauguración de su céntrico local que era inadmisible gastar 6 millones de dólares en el estadio cerrado y no ayudar en las reparaciones de las policlínicas, con todos los inconvenientes que genera a los usuarios de los barrios. Díaz le recordó al semanario 20once que “así como logramos que 40 mil sanduceros acompañaran la fórmula Orsi-Cosse, Paysandú necesita un cambio para combatir el desempleo, la informalidad, todos los problemas del desarrollo del Departamento y nosotros creemos que somos la mejor alternativa para el departamento. Este gobierno dijo que iba a poner a Paysandú de pie y no lo logró”. Cerró su intervención expresando que “en el Departamento la desocupación en los jóvenes afecta a uno de cada cuatro sanduceros. Es necesaria una agenda de desarrollo que piense a mediano plazo. Supimos ser un Departamento que generaba un PBI por habitante superior al 30% de la media nacional y ahora está por debajo de la misma, un 30% menor. No se ha logrado la reconversión”.
Pie de barro
Pese a que la consigna de Olivera en la pasada campaña fue “Paysandú de pie”, parece, al ver la situación del Departamento, que la propuesta tuvo pie de barro. Ahora la consigna mudó a “Olivera sigue”.
(Intendente intervino una Alcaldía; “sácame bo” dijo el Alcalde de Porvenir)
A la opacidad informativa, (nunca se informó sobre los resultados económicos de las últimas Semanas de la Cerveza) discrecionalidad, una Junta Departamental muy desprestigiada por la actuación de sus correligionarios, ninguneo a proyectos que venían del periodo del FA y bravuconadas no concretadas, como ser el cobro de un canon a las empresas transportistas que salen con carga en días posteriores a la lluvia y rompen caminos transcurrió la gestión. El gobierno de Olivera, se dio el lujo de ningunear el proyecto urbano, transformador, en la ex textil Paylana. Proyecto pensado en la administración de Guillermo Caraballo, (nuevamente postulado) que da solución habitacional a más de 350 familias, construye un CAIF, edificio para jubilados, 8 cooperativas, centros educativos (UTEC, por ejemplo) y espacios para emprendimientos. El proyecto tiene un Decreto de la Junta que la IDP ignora olímpicamente. Por ejemplo, las cooperativas abonaron 32 mil UR y se preveía la constitución de un Fondo de Gestión Territorial que nadie sabe que pasó. El proyecto urbano es un antes y un después en la ciudad capital; cambió la forma de hacer ciudad, integrando actividades y poblaciones. En parte, el FA, por distintas circunstancias no ha puesto en valor el mismo, que implicó, además, decisión política, recursos, coordinación interinstitucional y participación de los involucrados.
Colorados blancos
Olivera, pese a estar sentado en el Senado, trasmite su preocupación a sus correligionarios: ya no parece que la elección de mayo sea un trámite. El susto que “despertó al mamao” se extiende a otros Departamentos. No parecen suficientes los viejos métodos clientelares, pagar por reparto de listas y prometer “villas y castillos” o entregar canastas como hacían ex jerarcas del MIDES, etc.
El mismo Olivera, negociando fuera de la orgánica colorada, lo que generó gruesos reproches internos en dicha colectividad, elogiaba a un ex diputado, Ricardo Molinelli que, pese a la decisión de presentar candidatos colorados en mayo, integra la plancha del hoy senador. Las otras dos listas del PN integran cabildantes e independientes.
El sumun fue la actuación del ex diputado colorado Juan Carlos Moreno que apoyó en la convención a uno de los candidatos propuestos y a las pocas horas salió dando su apoyo a otro candidato del PN, Jorge Larrañaga Vidal. Esta acción determinó renuncias en el Ejecutivo Departamental colorado. Gino Belvedere que apoyaba Moreno se mostró indignado en distintos medios de comunicación. Antes, el ex subsecretario de Industria, electo diputado, Walter Verri, hacia malabares para desmentir acuerdo con Olivera que se plasmó con la inclusión de Molinelli. En una especie de sincericidio, Larrañaga Vidal dijo que se trata que no vuelva el FA. No existe acuerdo programático, aunque niegan que sea por cargos, veremos.
El manejo feudal, -60 años hace que el PN gobierno Tacuarembó y desde 1958 Colonia-, la corrupción (está el caso en Artigas), procesamientos en Soriano, cuestionan una forma de gestionar que tiene de rehén a la gente y se ha asumido como normal; casi indispensable.
La buena performance del FA en el interior, que podrá toda la carne en el asador en mayo y repetirá el método del mano a mano en todo el territorio, pone nerviosos a la dirección del honorable, punteros territoriales y legisladores correligionarios. A Olivera también.
(*) Darío Rodriguez es Licenciado en Ciencias de la Comunicación (UdelaR), periodista y asesor en temas de cooperativismo, vivienda y hábitat.